Historia del Pueblo de Añasco

Historia de Añasco

Añasco está estrechamente relacionado con los hechos del Descubrimiento, la conquista y la colonización de Puerto Rico. Según afirma una tesis muy bien argumentada, Cristóbal Colón fondeó sus naves, el 19 de noviembre de 1493, en la desembocadura del río llamado por los tainos Guaorabo, hoy conocido como Grande de Añasco. En ese territorio el hombre de mar García Alonso Cansino soltó varias parejas de cabras y cerdos por instrucciones de Martín Alonso Pinzón, para que éste pudiera justificar que "había poblado" la isla antes de que venciera el término de un año que le habían dado los Reyes para ello. De nada le sirvió, porque la Corona no aceptó esta interpretación a la palabra "poblar". Era cacique de esta región Urayoán, el mismo que para convencer a sus guerreros que los españoles eran mortales, les ordenó ahogar al joven Diego Salcedo, y provocó así la rebelión taína. Una vez vencida ésta Juan Ponce de León autorizó a Luis de Añasco, uno de sus tres capitanes, a poblar en las márgenes del Guaorabo. Allí el conquistador fundó una ranchería. Su apellido sirvió para bautizarla y más tarde para darle nombre al actual munici­pio. Pero cuando Juan Cerón tomó el mando de la isla a nombre del Virrey Diego Colón, quitó los naborías que le ha­blan sido encomendados a los amigos de Ponce y los dio a los amigos de Colón, por lo cual Añasco, sin trabajadores, quedó en la pobreza. Cerón fundó en la desemboca­dura del Guaorabo una población que lla­mó San Germán, y algunos de los vecinos de la ranchería ahora arruinada se trasladaron a ella. Ya sabemos que ese primer San Germán tuvo corta vida. Después de muchos años de abandono, la ranchería, alejada de la capital y del nuevo San Germán, fue atrayendo vecinos, y en 1730 se erigió una pequeña iglesia bajo la advocación de San Antonio Abad de Añasco. Tres años después, bajo el go­bierno de Matías de Abadía, por real orden Añasco fue declarado pueblo. Entre 1813 y 1836 funcionó una Aduana en el puerto, lo cual demuestra que éste había adquirido importancia. Unas veces formó parte del partido de San Germán, otras veces de Aguada. En 1856 la población sufrió el ataque del cólera morbo que desde el año anterior asolaba la isla, y diez años más tarde la viruela arrasó con gran parte de sus habitantes. Cuando tuvo lugar el Grito de Lares, en 1868, fueron muchos los añasqueños que tomaron parte en la insurrección. Poco después se fundó el Ayuntamiento y nueve años más tarde nació el primer periódico de esta población, "El alba". En 1880 Sergio Ramírez de Arellano estableció la primera escuela privada.